sábado, 24 de agosto de 2013

GUERRAS MÉDICAS



Una serie de acontecimientos han marcado la historia del mundo, qué hubiese sucedido si algunos de estos  no hubiesen sido cumplidos, ¿estaríamos igual? Bueno tal vez si o tal vez no, pero para que los cambios llegaran, personas tuvieron que tomar decisiones en determinadas circunstancias que en un momento dado cambiaron el rumbo de una nación. 
Hace miles de años diversos eventos dieron un giro total al futuro de la humanidad, uno de ellos tuvo lugar durante la primera de las llamadas Guerras Médicas, entre griegos y persas, el 12 de septiembre de año 490 antes de nuestra era el imperio persa (550-330 a.C.), como otros sistemas de dominio anteriores del Próximo Oriente, se basó en la ocupación permanente de los territorios conquistados y en la explotación de los mismos. Pero los persas tendieron a organizar su proceso de expansión con poca reestructuración de la organización anterior de los grupos y territorios conquistados, es decir, detentaron un imperio de tipo "patrimonial". 

Los conflictos entre griegos y persas se abren realmente con la conquista de la capital lidia, lo que provoca una tensión creciente en la zona del Asia Menor, donde las ciudades griegas se van a sentir amenazadas. Esta situación estallará en los años iniciales del siglo V a.C. con la rebelión de las ciudades jonias de Naxos y Mileto. 
Mileto  colonia griega, ubicada en el Asia menor, no pudo soportar el yugo persa y, con ayuda de tropas Atenienses, inicio una lucha, pero finalmente cayo vencida.
Darío, el soberano persa, no pudo olvidar la intervención de Atenas en el incidente y entonces juro vengarse y destruir la ciudad griega.
Darío I se propuso terminar con la sublevación de los griegos asiáticos, y conquistar Grecia para cortar definitivamente los apoyos que aquellos recibían. 
Ante la llegada de los persas a territorio europeo las reacciones fueron diferentes. Atenas quería detener la invasión como fuese y solicitó ayuda a los espartanos para luchar en la Batalla de Maratón (septiembre del 490 a.C.). Sin embargo, el origen del problema residía en las colonias griegas en Asia, y Esparta, no había fundado ninguna ni tampoco las había ayudado, como se ha indicado, por tanto los lacedemonios no se sentían implicados, tanto es así que a la Batalla del Maratón no acudieron por estar celebrando los juegos sagrados. 

La gran batalla entre los atenienses y los persas tuvo lugar 13 de septiembre del año 490 a. C. El ejército persa de Darío I fue derrotado por los atenienses dirigidos por Milcíades. Esta victoria permitió a los griegos regresar rápidamente a Atenas, evitando un ataque marítimo persa sobre la ciudad. También incitó a los griegos a continuar la lucha y derrotar por completo a los persas diez años más tarde.   

La segunda guerra médica la inicia Jerjes en el año 480, partiendo por tierra desde Sardes con su ejército mientras que la flota sale de Clazomene. Tras cruzar el Helesponto se encaminó por la Tracia hacia Macedonia entrando en Tesalia, siempre con el cercano apoyo de su flota. Esparta responde al ataque persa con la creación de una Liga Militar Helénica bajo su dirección, que se enfrenta a los persas en el cabo Artemision en 481, obteniendo un resultado favorable. 

La tercera guerra Médica. (479-449 a.C.)

Aunque los griegos habían desalojado a sus enemigos del territorio continental, la guerra marítima prosiguió en las islas del mar Egeo y en las costas del Asia Menor.
El jefe Espartano Pausanias desalojo a los persas de Chipre y sitio a Bizancio, hoy Constantinopla, pero en ese lugar, y dominado por la codicia, entro en negociaciones con el enemigo, por lo que fue destituido y condenado a muerte.
Esparta, que no era potencia naval, no deseaba proseguir la lucha en territorios Asiáticos y, cuando sus generales se enteraron de que las colonias griegas pensaban entregar el mando a Arístides, decidieron retirarse de la lucha. El jefe ateniense reunió doscientas ciudades, con las que formo la confederación de Delos, cuyos integrantes debían contribuir con dinero, naves y soldados.
Atenas confió el mando de la flota a Cimon, quien durante cerca de veinte años prosiguió la lucha contra los persas. Los expulsó de las costas norte del mar Egeo y también de buena parte de Asia Menor. Artajerjes se rindió y accedió a firmar la llamada paz de Cimon, que puso fin a las Guerras Medicas.

De haber sido derrotados los griegos en Maratón,  hubiera sido imposible el Siglo de Pericles,  y en consecuencia tal vez nunca se hubiera  consolidado el “hechizo jónico”. Alejandría, se convertiría durante varios  siglos en la capital cultural y científica del   mundo y desde cuya Biblioteca la primera gran universidad del planeta, irradiaría  como potente faro hacia todo el mundo “occidental” la sabiduría griega. Fue en Alejandría,  por ejemplo, en donde Euclides sistematizó,  en sus famosos Elementos, casi todo el corpus  matemático griego existente hasta su tiempo  (principios del siglo III), obra que hasta el  siglo XIX constituyó el paradigma de toda  construcción axiomática. Y fue en Alejandría  en donde por primera vez Eratóstenes (siglo III) midió con asombrosa precisión la circunferencia terrestre. 

EL "MILAGRO" DE MOISÉS Y LOS PERSAS

Una nueva incógnita surge en el camino de la historia, se trata de la forma de obtener agua de los persas y el método utilizado por Moisés al liberar al pueblo de Egipto, cuando estos tenían sed. Son dos historias similares pero una de estas como ya habría de esperarse es más creíble que la otra. 

Los israelitas se fueron del desierto de Sin, y se detenían en cada lugar que Dios les ordenaba. Al llegar a un lugar llamado Refidim, acamparon pero no encontraron agua, así que le reclamaron a Moisés:
¡Tenemos sed! ¡Danos agua!
Moisés les contestó:
¿Y por qué me reclaman a mí? ¿Por qué dudan del poder de Dios?
Pero era tanta la sed que tenían, que comenzaron a criticar a Moisés. Le dijeron:
¿Para esto nos sacaste de Egipto? ¿Para matarnos de sed, junto con nuestros hijos y nuestros animales?
Entonces Moisés le pidió ayuda a Dios, y le dijo:
 ¿Qué voy a hacer con esta gente? ¡Poco les falta para matarme a pedradas!
 Dios le contestó:
Quiero que lleves a los israelitas hasta la montaña de Horeb. Allí estaré esperándote, sobre la roca. Tú adelántate, y llévate a algunos de los jefes del pueblo. Llévate también la vara con la que convertiste en sangre el agua del río Nilo. Cuando llegues allá, golpea la roca con la vara. Así saldrá agua de la roca, y todos podrán beber. 

Esta  técnica podría atribuirse que sucedió por Moisés, pero resulta que años antes los persas también utilizaban este método de sacar agua a través de las piedras. 
Resulta que los persas no encontraron el agua, en rio lagos y el océano sino en las rocas. Para encontrar agua tenían que recorrer grandes distancias, pero fueron los magi, ingenieros o hechiceros que  idearon la manera de llevar el agua a los pueblos con utensilios como cinceles para escavar sobre las rocas. Fueron estos hechiceros quienes pusieron las bases del más grande imperio conocido por el mundo. Lo hicieron mediante un revolucionario sistema de canales subterráneos de irrigación, llamados kanats su funcionamiento se servía del aprovechamiento de  la gravedad, para aprovechar la topografía natural del terreno en una pendiente en dirección al golfo pérsico.
Desde la superficie se introducían ejes verticales y desde estos se escavaba túneles horizontales de poca longitud alrededor de un kilómetro colina arriba se volvía a construir otro eje y así el canal iba avanzando, realmente no tenía tecnología avanzada pero sabían a provechar los recurso y el conocimiento avanzado que tenían. 2 mil años antes de los acueductos romanos, los persas ya canalizaban agua a grandes distancia en condiciones de gran sequedad sin perder nada por la evaporación.
El sistema de los kanats quizá fue por miles de años el método más eficiente para obtener o llevar el agua subterránea y es muy reciente los sistemas que hoy vemos trabajando en nuestras casas como la perforación y bombeo de agua de los pozos. El conocimiento sobre el sistema de kanats desde su nacimiento se heredó de generación en generación. 
Al saber la historia de los persas, habría que investigar si el “milagro de Moisés, en realidad fue tal suceso. Y es que los persas a lo largo de la historia no solo sobresalieron por su poderoso imperio sino también por sus palacios, edificios, el arte plasmado en cada uno era impresionante. 
Entonces diríamos que la Biblia a lo largo de los años inspiro sus historias, en las antiguas costumbres y tradiciones de los pueblos, y sus relatos como se ha venido planteando en diversos artículos no son más que nuevas adaptaciones de hechos ocurridos anteriormente. 



ARTE PERSA

Los sitios arquitectónicos más antiguos de la sociedad fueron construidos en PERSA.
La antigua Persia, era un país de Medio Oriente, sobre el actual territorio de Irán, limitaba al norte con el Mar Caspio, Armenia y Rusia, al este con Afganistán, al sur con el Golfo Pérsico y al oeste con Irak. En Persia se estableció unos de los imperios más grandes del mundo lleno de conquistas y riquezas. Ciro el grande fue quien fundó el primer Imperio persa bajo la dinastía aqueménida. Este imperio se extendió durante su reinado, pues conquistó la mayor parte del suroeste de Asia así como gran parte de Asia central, desde Egipto y el Helesponto hasta el río Indo. 

Arte en Persia.
El arte persa refleja influencias egipcia y caldeo-asiria. Las ruinas de sus palacios denotan la presencia de elementos tomados de ambas culturas.  En la época aqueménida (Ciro el Grande, Cambigen II, Darío I, Jerjes, Artajerjes, Darío II, Artejerjes II, Artejerjes III, Darío III) el arte se expresa en escultura y la arquitectura, en grandes ciudades: Pasargardas, Susa, Persépolis, fundadas por estos dos últimos. 
Persépolis cuenta con la mayor apadana jamás construida, llena de detalles sorprendentes y carismáticos de la civilización persa y con una extensión de tiene 112.000 metros2. Era el eje administrativo de la ciudad con una altura y una grandeza muy superior al resto de edificios de la ciudad. Se necesitaron miles de arquitectos, artesanos y trabajadores para la construcción de Persépolis. 
Persa fue el primer pueblo que, pretendiendo hacer síntesis imperial de los estilos de su tiempo, produjo un arte nacional. Es decir, de la suma de las partes salió un todo que era ya mucho más que la mera adición de las influencias recibidas, pues era ya otra cosa, un nuevo arte que estaba impregnado de las características propias de una cultura de gran importancia. En esta ocasión nos enfocaremos en dos de los grandes sitios arquitectónicos más antiguos de la sociedad  construidos en el poderoso imperio. 
El Mausoleo de Halicarnaso
Considerada una de las siete maravillas del mundo. Era una tumba monumental de mármol blanco construida en el año 305 para Mausolo (gobernante más destacado de la satrapía de Caria) bajo las órdenes de su esposa Artemisa cuando este murió. Artemisa tomó la decisión de alzar en la colina más alta de la ciudad el monumento funerario más impresionante que jamás se hubiese construido. La construcción fue comenzada durante el reinado de Mausolo y fue terminada alrededor de 350 a. C., 15 días después de su muerte y un año después del fallecimiento de Artemisia.
Esta tumba destacaba por la belleza de su diseño y por la riqueza de sus esculturas. En su construcción intervinieron los mejores artistas de la época: Piteo, Bryaxis, Leochares, Scopas y Timotheus. Quienes edificaron una base rectangular revestida con placas de mármol, sobre la que asentaron 117 columnas de estilo jónico en doble hilera que sostenían un techo de forma piramidal. La edificación completa superaba  los 40 metros de altura. El mausoleo estaba dividido en tres partes: un podio de planta cuadrangular, una columnata intermedia con 36 columnas y un cuerpo piramidal coronado por una cuadriga. 
En el siglo XIII un terremoto derribó la parte superior del monumento y sus restos fueron utilizados por los caballeros de Rodas para construir el castillo de Bodrum. Muy poca gente ha recibido un monumento funerario tan impresionante como el de Mausolo. 
Arqueros de Susa 

Irán posee numerosos tesoros escondidos a lo largo de su vasto territorio. Uno de ellos es el llamado Palacio de Susa, creado en la época aqueménida, y recrea el pasado de la región durante los tiempos antiguos, proyectando la cultura, arquitectura y arte de los ancestros.
EL Friso de los arqueros adornaba el famoso palacio mandado a construir por orden de Darío I (522-486 a.C.), que trasladó la residencia real y la administración del Imperio, desde Pasargada hasta Susa, la nueva sede.
Muy poco ha llegado de su riqueza constructiva y decorativa, que debió ser inmensa. Pero se conservan en el Musée du Louvre de París abundantes fragmentos de los frisos que decoraban la residencia real y que datan del siglo v a.C. Algunos, realizados en relieves esmaltados sobre ladrillos, muestran a animales en procesión, unos reales y otros fantásticos, inspirados sin duda en la famosa Puerta de Isthar de Babilonia. 
Los persas lograron un dominio extraordinario de la técnica del esmalte, introducida por los ka-sitas y perfeccionada durante el Segundo Imperio Babilónico. Esta técnica tuvo una enorme difusión, ya que con ella se conseguía un efecto decorativo de gran impacto visual.
La arquitectura persa es, como hemos visto, un arte monárquico, en el sentido de que casi la totalidad de sus realizaciones está ligada directa o indirectamente con la realeza. Actualmente es considerada como una concepción artística que destaca por ser ecléctica, comprensiva e internacional.

CIRO EL GRANDE

Babilonia una ciudad cuyas historias son impresionantes, en diversas ocasiones fue el centro de grandes imperios, hasta que la ira de Dios cayó sobre esta. 
“El rey Judá sucumbió ante los invasores babilonios, Jerusalén fue arrasada; sus murallas y su magnífico templo construido por el rey Salomón, fueron completamente demolidos. La mayoría de los ciudadanos de Jerusalén y de Judá fueron llevados cautivos a Babilonia. Sin embargo dios no olvidó su promesa de llevar a su pueblo de regreso a Jerusalén”. Esta promesa está contemplada en la carta de Jeremías a los cautivos, donde les exhorta a no dejarse engañar por los falsos augurios, creyendo que pronto va a operarse su retorno a la patria. El destierro tendrá fin, pero será largo. 
El tiempo de esclavitud de los judíos fue de 70 años, hasta que Dios eligiera al liberador de este pueblo: Ciro el Grande.  

Ciro fue Rey de Persia (559-529 a.C.). El reino de Ciro se extendió 3220 kilómetros el más grande imperio entonces conocido e incluía los territorios de los imperios asirio y Babilónico. Ciro fue escogido por Dios para devolver a su país a los judíos desterrados. Estos habían sido deportados a Babilonia por Nabucodonosor, rey de Babilonia en los años 606 y 587, lo cual provoco el fin de Israel en la tierra de Palestina. La mayor parte de ese pueblo, las tribus del norte: Efraín, Manasés y las otras menos importantes, habían ya dejado de existir como reino Israel después de las deportaciones asirias de los 634 y 621. Años más tarde, el rey persa Ciro el Grande conquista Babilonia (539 a.C.) iniciando una nueva política religiosa, permitiendo la vuelta a los desterrados a sus lugares de origen, así como la restauración del culto a los santuarios destruidos. 
La Biblia menciona a Ciro en el Capítulo de Isaías cuando Dios el redentor lo comisiona: 
Así habla Dios tu redentor, el que te formo desde el seno materno:
Yo, Dios, he hecho todas las cosas, yo sólo estire los cielos, yo afirme la tierra, ¿y quien estuvo conmigo?
Yo digo a Jerusalén “Volverás a ser habitada” Y a las ciudades de Judá: “Serán reconstruidas, pues las levantare de entre sus ruinas”. 
Yo digo a Ciro: “Aquí está mi pastor” y sale para cumplir mis deseos. Él dirá por Jerusalén: ¡Que la levanten!, y por el templo ¡Que sea reconstruido! Para doblegar a las naciones y desarmar a los reyes. Hice que las puertas se abrieran ante ti y no volverían a cerrarse. 
Yo iré delante de ti y aplanare las pendientes. Te daré los tesoros secretos y las riquezas escondidas, para que sepas que yo soy el Dios de Israel que te llamó por tu nombre. 

En su primer año de reinado sobre Babilonia 539/8 a.C. Ciro dio cumplimiento a las palabras que Dios le había anunciado por medio de Jeremías las cuales establecían la reconstrucción del templo en Jerusalén de Judá. El decreto fue un signo de su benevolencia con las diferentes culturas y religiones de los pueblos que había reunido en su inmenso imperio. 
Para la conquista de Babilonia Ciro recibió el apoyo de los sacerdotes en Babilonia, quienes estaban enfrentados a Nabónido (rey de Babilonia en ese entonces) a causa de las reformas religiosas, por ello es que la llegada de Ciro a la ciudad es celebrada por muchos. En poco menos de treinta años, Ciro extendió los dominios persas hasta Asia Menor, la India y Egipto, creando el mayor imperio de la historia hasta la aparición del poder romano.
Algunas características sobresalientes de Ciro fueron:
 El fin que puso al cautiverio de los judíos, permitió el regreso de miles de ellos a  Palestina, la restauración de su religión, se presentó como un liberador, no como un conquistador. Es por esto y más que para la Biblia Ciro fue el “ungido de Dios”, que en hebreo se dice “Mesías”, término que la Biblia reservaba para el sumo sacerdote o para el rey heredero de las promesas hechas a David.   
La biblia menciona a Ciro en sus libros, entre ellos están:

Isaías (capítulos 45,1) en este libro se le llama Ungido (Mesías) a Ciro.
Esdras (capítulo 1 versículos 2-4) se presenta una versión del edicto de Ciro que pone fin el exilio judío en Babilonia.
Daniel posee varias referencias a Ciro.
El Segundo libro de las Crónicas (36, 22-23) presenta otra versión del edicto de Ciro. Esdras (1, 2-4) 

Ciro Grande fue considerado un hombre gentil y humilde, se distinguió por una política de tolerancia religiosa hacia los pueblos vencidos. Un hombre justo y clemente, murió en el año 530 a.C. Darío primo de este asumió el cargo de rey, considerándolo el más legendario rey de persa.  El templo de Dios fue terminado, el tercer día del mes de Adar, en el sexto año del reinado de Darío.

























viernes, 23 de agosto de 2013

ZIGURAT Y TORRE DE BABEL


Código de Hammurabi y los diez mandamientos de Moisés, el diluvio bíblico y su relación a la epopeya de Gilgamesh, historias que generan dudas sobre el origen de la Biblia y su escritura. Y es que sus creadores los israelitas, comenzaron a escribirla  en Babilonia, posiblemente se influenciaron de las costumbres y tradiciones de la ciudad, y es por ello que muchos afirman que las historias planteadas en los textos bíblicos son nuevas adaptaciones de hechos que ocurrieron hace miles de años.
Esto es lo que también sucede con la famosa torre de Babel y el zigurat mesopotámico. Ambas obras eran formalmente parecidas. En las primeras páginas de la Biblia, en Génesis 11, 1-9, se describe la Torre de Babel como el lugar donde surgieron las lenguas del mundo. El relato bíblico narra que hombres pretendían  construir una ciudad con una torre que llegara hasta el cielo, sueño que no se concreto porque Yahvé Dios confundió sus lenguas y  los disperso sobre la superficie de la tierra, dejando de construir la torre.  Por otra parte, el Zigurat era un templo de adoración al dios protector de la ciudad Marduk. Aunque también se utilizaba como observatorio astronómico. Estaban compuestos por una serie de pisos a cada una de menor planta y altura, pintados de distintos colores. Es posible que la altura a la que estaba construido un zigurat, haya sido inspiración para que los hebreos decidieran construir  una torre que llegara hasta el cielo. 
Resulta que ambas obras fueron realizadas con significados diferentes, a pesar de que el objetivo de estas era servir de enlace entre la tierra y el cielo. En primer lugar, el zigurat era una escalera descendente, solo usada por la divinidad cuando, accediendo a los ruegos de los humanos, decidía acercarse a éstos. Seguidamente la Torre de Babel era una escalera por la que solo se subía, y quienes lo hacían eran los hombres deseosos de alcanzar el cielo, hacerse famosos y llegar hasta Yahvé Dios. Demostrando que la Torre de Babel era signo de orgullo, no de sumisión. 
La historia de estos dos lugares, es un tanto similar, pero la diferencia radica en que según investigaciones científicas, los zigurats si existieron. Científicos aseguran que se conocen más de veinticinco de ese tipo de construcciones halladas particularmente en las ruinas de ciudades sumerio-babilónicas situadas al sur de la antigua Mesopotamia. Aunque no se ha encontrado ningún zigurat de forma íntegra y completa, solo se conservan las trazas de los cimientos. En cambio de la Torre de Babel no se ha encontrado rastro alguno de su existencia por lo que se asegura que la torre pudo estar basada en los zigurats de Babilona. 
Quizá no exista mucha diferencia, pues ambas obras se conectaban de la tierra al cielo, adorando a su Dios o dioses. 

EL ORIGEN DE LAS LENGUAS Y LA TORRE DE BABEL


Babilonia, la ciudad cosmopolita cuyo nombre antiguo Babel, se aproxima a la palabra confusión y que repetidas veces fue el centro de extensos imperios. Estaba construida totalmente de ladrillos en el delta del Tigris y del Éufrates, y sus templos en forma de pirámides recortadas parecían sin concluir.
 Pero, ¿qué acontecimientos marcaron la historia de Babilonia? Uno de ellos y el que nos interesa en esta ocasión es la Torre de Babel, lugar donde según la Biblia se originaron las lenguas. 
“Toda la tierra hablaba una misma lengua y usaba las mismas palabras. Al emigrar los hombres desde Oriente, encontraron una llanura en la región de Sinear, y se establecieron allí. Entonces se dijeron unos a otros: “Vamos a hacer ladrillos y cocerlos al fuego.” El ladrillo reemplazó la piedra y el alquitrán les sirvió de mezcla. Después dijeron: “Construyamos una ciudad con una torre que llegue hasta el cielo. Así nos haremos famosos, y no nos dispersaremos por todo el mundo”.
Yahvé bajó para ver la ciudad y la torre que los hombres estaban levantando, y dijo Yahvé: “Veo que todos forman un solo pueblo y tienen una misma lengua. Si esto va adelante,  nada les impedirá desde ahora que consigan todo lo que se propongan. Pues bien, bajemos y confundamos ahí mismo su lengua, de modo que no se entiendan los uno a los otros.”   
Así Yahvé los dispersó sobre la superficie de la tierra, y dejaron de construir la ciudad. Por eso se la llamó Babel, porque allí Yahvé confundió el lenguaje de todos los habitantes de la tierra, y desde allí los dispersó Yavé por toda la tierra“.    
En la perspectiva del relato, este fenómeno cultural aparece como un nuevo intento de la humanidad de construirse un mundo al margen de Dios y, en cierto modo, de superar sus límites y ser como Dios. Tal proyecto, grandioso a los ojos del hombre pero insignificante a los de Dios.  Este es según la Biblia el verdadero origen de las lenguas. 
En la realidad no todos coinciden en lo planteado en la Biblia sobre el origen de las lenguas y es que esta historia bíblica no tienen fundamento alguno, sabemos que existe Dios, pero en este punto podríamos decir que la Biblia exagero de alguna manera, pues es muy poco creíble que los idiomas surgieran a partir de la confusión de lenguas que Dios llevo a cabo ante la “revelación” del hombre.
Incluso existe una técnica llamada glotocronología la cual es una división de la lingüística encargada de fijar la antigüedad de las lenguas. Según los cálculos del profesor Johanna Nichols, expuestos en 1998 ante la Academia de Ciencias de California, la edad del lenguaje humano es superior a los 130.000 años si tiene un origen monogenético y 100.000 si es poligenético, procedente de al menos 10 cepas distintas. Si esto fuese así, entráramos a un debate respecto a los años de existencia de la humanidad según la Biblia y las publicaciones del profesor Nichols, sobre la antigüedad de las lenguas. Es decir que los datos no concuerdan, es posible que los idiomas surgieran miles de años antes del relato bíblico. Y si esto fuese así aceptaríamos la teoría de muchos científicos: “El hombre en su necesidad de comunicarse, empezó a utilizar sus propios medios de comunicación. Comenzó a hacerlo a través de gestos, sonidos, señales de humo, tambores, pinturas y gemidos. Este proceso comunicativo fue evolucionando con la misma transformación del hombre, combinándose hasta producir un sonido articulado, convirtiéndose la comunicación en una necesidad, lo que denotaba un nivel de superioridad en el desarrollo de la humanidad.”
Con el paso del tiempo, la ciencia acabo desechando el problema, por considerarlo incompatible con la objetividad científica. Pues las leyes humanas del lenguaje es estudiado por la Lingüística. 
La incógnita sobre este tema aún es un misterio, aunque a pesar de lo planteado en la Biblia, las investigaciones expuestas por la ciencia son más creíbles que la historia de Babel. 


EL ARCA DE NOÉ Y LA EPOPEYA DE GILGAMESH


La historia del Arca de Noé pertenece a los capítulos 6 al 9 del Génesis (el primer libro de la Biblia).
Comienza con que Dios, vio que la maldad del hombre era grande y que todos sus pensamientos tendían siempre al mal.  Se arrepintió de haber creado al hombre, así que decidió inundar la tierra y destruir todo tipo de ser viviente. Sin embargo, se dio cuenta de que existía un hombre muy bueno que se llamaba Noé y decidió que sería  él  junto con su familia los que se salvarían.
Dios le dijo  a Noé que construyera un arca gigantesca, y llevara con él a su esposa, a sus hijos Sem, Cam y Jafet, y las esposas de éstos. También, tenía que salvar a una pareja de cada una de las especies de animales que existía sobre la tierra, macho y hembra, y para suministrarles alimentos, le dijo que tomara y almacenara la comida necesaria. Dichas parejas deberían estar dentro del arca antes de que comenzara a llover porque ya no pararía hasta que Él le avisara, y así lo hizo. Llovió sin parar durante cuarenta días y cuarenta noches inundándose toda la tierra. Únicamente Noé y los que estaban con él en el arca se pudieron salvar del diluvio. 
Pero recordemos que la moneda no tiene un solo lado, y, ¿por qué se dice esto? Bueno  existe la posibilidad que la historia de la inundación del Génesis es una versión re-escrita de un mito original, la Epopeya de Gilgamesh, un relato mítico mesopotámico. En la actualidad es considerada  la historia más antigua, para su conservación se emplearon tablillas de arcilla y escritura cuneiforme lo cual favoreció su preservación. El relato se basa en las aventuras del rey Gilgamesh y su amigo Enkidu. Las hazañas para matar al gigante Khumbaba, el descenso a los infiernos y la relación entre dioses, semidioses y mortales le dan un claro origen prehelenístico. El núcleo sentimental se encuentra en el duelo tras la muerte de Enkidu. Luego de este hecho Gilgamesh temió por su vida y comenzó en la búsqueda de la inmortalidad, en este camino encontró a Utnapishtim, que es el  personaje que nos interesa para conocer si lo planteado en la Biblia es cierto o es una nueva adaptación de lo que ya se escribió.  A Utnapishtim le había sido concedida la inmortalidad por los dioses, después de su rescate de la inundación. Utnapishtim entonces relató la inundación y cómo se hizo eterno. La inundación de la Epopeya de Gilgamesh está contenida en la tablilla XI de doce grandes tablillas de piedra que fueron escritas cientos o miles de años antes que la Biblia.  He aquí algunas de las similitudes de estas historias:
El personaje principal es advertido para que construya una embarcación para escapar de la inundación (Noé- Utnapishtim).
El personaje principal recibe instrucciones de que se salve, a su familia y aun ejemplar de cada animal.
Las embarcaciones se detuvieran finalmente en una montaña. 
¿Cuáles son las diferencias¬?
Razón por la inundación –    Génesis: La maldad del hombre
                                                 Gilgamesh: La bulla excesiva
La respuesta de la deidad – Génesis: Dios se arrepintió de haber creado al hombre 
                                                  Gilgamesh: Los dioses no podían dormir
Qué carácter fue escogido en el personaje principal – 
                                           Génesis: Noé un hombre justo
                                           Gilgamesh: Utnapishtim Ninguna razón dada 

Si la epopeya de Gilgamesh se escribió años antes que la Biblia según investigaciones, con el paso del tiempo irán surgiendo más interrogantes sobre quienes escribieron la Biblia y en que se basaron para hacerlo. El misterio sobre estas historias aún continúa y resolverlo ya no solo será tarea de la ciencia sino de todas las ramas involucradas en el tema.

CÓDIGO DE HAMMURABI VRS. LEYES MOSAICAS



Babilonia fue la primera civilización de la tierra en tener un código de ley escrito. 1200 años antes que los israelitas hubieran sido prisioneros, un rey babilonio decidió entablar una normativa con el código que lleva su nombre código de Hammurabi. Este ha influido en diversas civilizaciones a lo largo de la historia. Según muchos sus leyes están presentes a través de la Biblia reflejadas en  los diez mandamientos, establecidos dentro de la Ley de Moisés. Y es que según investigaciones 500 años antes de que aparecieran las normas Mosaicas, el código de Hammurabi ya estaba establecido (aunque otras investigaciones afirman que este código apareció 12000 años antes de la Ley Mosaica). Por lo que afirman que los hebreos derivaron su derecho del babilonio. 
Son dos contextos similares, La Biblia a través de Éxodo describe la historia de Moisés el Liberador de los israelitas, Yavé, único Dios, los había escogido para que fueran su pueblo. Moisés y los suyos permanecieron bastante tiempo en el oasis del Sinaí, y allí Moisés les dio la ley que Dios le había entregado. En estas leyes Dios pide a su pueblo justicia, bondad, respeto de la vida, etc.  Por otro lado Hammurabi dijo que su código fue revelado por el dios babilonio de la justicia, Shamash. Con el objetivo de establecer un estado consolidado, se borró el viejo sistema de autonomía local, y se dio un carácter supremo a la autoridad y el poder del soberano. Los códigos antiguos tienen la particularidad de atribuirse el origen divino, para así asegurarse la obediencia de los súbditos. 
Hammurabi fue rey de Babilonia, de la dinastía amorrita. Se caracterizó por tener una buena administración, se le considera como el Primer gran Legislador de la historia. El Código de Hammurabi, contiene 282 leyes que legislan sobre una vida social y privada.
Pero el paralelo más cercano entre el Código de Hammurabi y la Ley de Moisés se presenta en la redacción común de “ojo por ojo” y “diente por diente”. Las leyes de Hammurabi 196, 197 y 200 establecen que “Si un hombre saca el ojo de otro hombre, sus ojos se apagó. Si rompe un hueso de otro hombre, el hueso se rompe. Y si un hombre golpea a los dientes de sus iguales, sus dientes se fuera de combate. ” Esto es muy similar a Éxodo 21:23-25, que dice: “Pero si no hay lesiones graves, que van a tomar la vida por vida, ojo por ojo, diente por diente, mano por mano, pie por pie, quemadura por quemadura , herida por herida, golpe por golpe. ”
Aquí otra comparación: Código Hammurabi “Si la esposa de un señor es sorprendida acostada con otro hombre, los ligarán (uno a otro) y los arrojarán al agua. Si el marido de la mujer desea perdonar a su mujer, entonces el rey puede (a su vez) perdonar a su súbdito”. 
Levítico 20:10.- “Si un hombre cometiere adulterio con la mujer de su prójimo, el adúltero y la adúltera indefectiblemente serán muertos”. 
En conclusión podemos decir que si bien el código Hammurabi y la Ley Mosaica tienen bastantes similitudes, no podemos afirmar aun cual es la verdadera historia  y cual no la es, al fin y al cabo todo en este mundo se determina por creencias personales, a pesar de las investigaciones hechas.


domingo, 18 de agosto de 2013

EL ENIGMA DEL ORIGEN DE LA HUMANIDAD

El misterio de cuando se originó la humanidad sigue siendo un rompecabezas, tantas son las piezas necesarias para explicar el enigma que resolverlo es una tarea complicada. Tarea que el hombre ha tratado de descifrar durante muchos años. Y es que muchos parten de lo plasmado en el capítulo de Génesis (Biblia) donde aparece la historia de la  creación del mundo, aludiendo que la vida es un milagro de Dios. La Biblia demuestra que la vida apareció en el siguiente orden: las plantas, la vida del agua, las aves, los animales de la tierra, y, finalmente, el hombre. Pero recordemos al final de todo que el centro principal de la Biblia es Dios, es decir que esta no se ha detenido en dar muchos detalles sobre la creación humana y el tiempo de esta. Por ello el génesis se escribió como  un ejemplo, no como un relato, solo para decirnos que nada existe salvo  por voluntad de Dios, claro que esto no es un sustituto de la ciencia sino un complemento para ella, y lo que hace es profundizar la interpretación que la ciencia puede proporcionarnos. 

Pero volviendo a la creación humana se dice que la Biblia cita que hace 6000 años apareció la humanidad. Resulta que en  la gruta de Corinto o del Espíritu Santo, en el Departamento de Morazán, se esconde un preciado tesoro que se registra como Monumento Nacional y es considerado la principal muestra de arte rupestre de El Salvador: Los Petrograbados, que datan de 10000 años de antigüedad. Arte que manifiesta la forma de vida de nuestros antepasados. En la gruta se pueden identificar figuras antropomorfas: seres humanos de ambos sexos, cuerpos completos, manos tanto en positivo (cuando se colocaban la pintura sobre la palma de la mano y la plasmaban sobre la superficie dejando una “huella”), como en negativo (cuando apoyaban la mano en la piedra, se llenaban su boca con la pintura y a través de la técnica del soplete y por medio de un tubo, que pudo haber sido un hueso hueco, soplaban hasta dejar la silueta de la mano plasmada). Igualmente se encuentran figuras zoomorfas; figuras de animales; figuras fitomorfas; flores, etc.

Entonces si la Biblia nos dice que hace 6000 años existía presencia humana, cómo es posible que en  Corinto, Morazán se encuentren petrograbados de 10000 años de subsistencia. 

Y efectivamente según el método científico sí hace diez mil años habitó gente en Corinto. Lo que pasa es que tenemos el materialismo histórico y la teoría creacionista. La primera se basa en el método científico y la última en la historia narrada en la biblia.
Sí La biblia habla de cinco o seis mil años, no más, ¿cómo podemos explicarlo? Bien, la respuesta en este caso sería, la teología es especulación y fe, no podemos afirmar que los años que narra la biblia son como los 365 días que vivimos ahora. En Génesis hay personajes que vivieron 900 años: ¿Son esos 900 años como los de ahora? tal vez sí tal vez no. Cuando en el mismo Génesis nos habla de que la tierra se creó en un día, puede ser que ese día haya sido muchos años y no un día de 24 horas. Los seis mil años de la biblia no pueden ser contados como los años que vivimos ahora. Que es posible que en la forma humana de vivir, sean seis mil años, pero quizás estos pueden haber sido muchos más.

En la actualidad son muchas las hipótesis sobre este cuestionamiento, incluso la editorial verbo divino (España) especializada en publicaciones religiosas quien es la encargada de la publicación LA BIBLIA LATINOAMERICA  ofrece una introducción particular a cada uno de los libros de la Biblia. En esta Biblia se habla de las primeras civilizaciones aludiendo que “Hace 10000 años, un cambio se preparó en la humanidad. Los hombres se agruparon en mayor número en las llanuras fértiles. En algunos siglos descubrieron la manera de cultivar la tierra, de criar el ganado de modelar y cocer la arcilla. Se levantaron aldeas que se unieron para defenderse y aprovechar mejor los recursos de la tierra. La primera civilización había nacido.” Entonces por qué la introducción de esta Biblia se produjo de esta forma si  su contenido escrito hace miles de años lo plantea diferente (aunque en realidad la Biblia no hace ninguna afirmación en cuanto a la edad de la Tierra, pero tampoco establece una edad mínima).

Desde hace cientos de años han surgido demasiadas discusiones sobre el tema de la creación según la Biblia y según la Ciencia, un problema muy mal planteado y cuya solución habitualmente se presenta en una forma aun peor.
Todas las religiones del pasado tuvieron sus cosmogonías, es decir su relato sobre el origen del mundo y también la Biblia tuvo los suyos y éste es el más importante actualmente.