ARTE GÓTICO EN LA CIUDAD DE SAN MIGUEL

En años, el hombre ha hecho una elaboración de la realidad a través del Arte. Percibiendo e interpretando esta realidad con procedimientos distintos a los del conocimiento abstracto y formal. Actividad que crea representaciones concreto-sensibles que reflejan la realidad al mismo tiempo que la actitud estética del hombre hacia ella. Y es que las imagines artísticas dan cabida a la fantasía y las invenciones. Y dentro de estas invenciones se encuentra el increíble Arte Gótico. El cual se desarrolló en la Europa occidental y central a mediados del siglo XII al siglo XV. El gótico coincide con el máximo desarrollo de la cultura urbana donde aparece la burguesía, las universidades y el florecimiento de las órdenes religiosas. 

La máxima expresión del gótico fue la Catedral; edificio gótico por excelencia y símbolo del reino de Dios sobre la Tierra. En esta época se introdujeron nuevos elementos en la Arquitectura, uno de esos fue el arco apuntado, llamado también Ojival, del que se deriva la bóveda de crucería que permite desplazar los empujes a contrafuertes externos, que se alejan aún más de los muros mediante el uso de arbotantes. Permitiendo la construcción de edificios más amplios y elevados. 

La iglesia medalla milagrosa de la ciudad de San Miguel, es un claro ejemplo del arte gótico, y una de las características es la LUZ, que ilumina a la iglesia. Ya que la luz, en los  edificios religiosos se caracteriza por la definición de un espacio que quiere acercar a los fieles, de una manera vivencia a través de los valores religiosos y simbólicos de la época. La iglesia está decorada por Vitrales, los cuales representan capítulos bíblicos y milagros reconocidos por la Iglesia Católica. El Vitral es gótico excepto las imágenes. La iglesia está dedicada a la virgen María y en la parte frontal se puede apreciar una estatua de esta, acompañada de flores, que representan las flores a María. Su diseño es muy propio de las capillas europeas, contando con el boceto de ojival, que representa la inspiración en los feligreses.